Estupenda fusión Japo Peruana, de nivel!!
Mi mujer me regaló una cena en Kena de Luís Arévalo. Habíamos estado en algún que otro Japo-Peruano con anterioridad, y no nos habían convencido mucho, pero Kena si nos convenció.
El sitio muy bonito, funcional, negros y blancos, mesas sin mantel (tan de moda), aunque algunas con poco espacio entre ellas. Parece que haya varios 'salones' o espacios diferenciados.
Mucho servicio, y muy bueno. Amables, serviciales, se explican perfectamente, etc.
Dos menús, Omakase I y II (menú corto 55€ y menú largo 70€). Bebidas e IVA aparte.
Elegimos un menú corto para mi mujer y uno largo para mí. Sin problemas: en otros sitios ya nos han puesto problemas por esto, pero hay gente que come más o menos, o que le gusta más los platos de un menú que los de otro. Entendemos la dificultad de encajar tiempos de cocina y de servir dos menús distintos, con número de platos distintos, pero se puede... en Kena lo hicieron muy bien.
Omakase I (corto): Steak Tartar de Presa Ibérica (muy bueno!), Gyoza de Rabo de Toro (buenísimas!), Tiradito de Chicharro (bueno), Tortilla de maíz con ají de pollo (muy rica!), Ceviche de Corvina (bueno), Sushi variado que son 4 niguiris (el de chicharro duro, salmón, atún riquisimo y lubina), Curry de ShoftSell Crab (muy rico pero muy picante) y un postre semifrío de café (muy rico)
Omakase II (largo): Ostra y navaja (riquísimas), Anticucho de molleja (muy bueno), Chupe de langostino (rico, caldo contundente), Carpacio de Carabineros (bueno), Salmonete (rico), Ceviche de Erizos (muy bueno), Sushi Variado (el mismo que el menú corto), Ceviche tibio de corvina (muy bueno), Wagyu (estaba bien, pero tampoco destacó), y el mismo postre.
Un Pisco Sour (muy bueno, pero caro, 10€), 3 copas de vino (2 blancos albariño y un tinto, 5€ x copa, caro), una cerveza Kirin (4€), Agua sin coste). Muy bien que no ponen en cuenta concepto por 'cubierto' x persona.
La calidad de la comida: exquisita. Muy bueno todo. Algunos platos más flojos (la carne de Wagyu tampoco me dijo nada). Pero todo el pescado buenísimo.
Combinaciones de sabores sorprendente, salvo allá dónde se abusa en exceso del cilantro, las leches de tigre de los ceviches buenísimas.
Salimos por unos 150€. Es caro, sí, pero creo que lo vale. Hacen un buen trabajo y nos hicieron disfrutar mucho. Comimos mucho y muy bien. Quizá el tema de las bebidas podrían ajustar un poco el precio, pero está dentro de la media de sitios con recomendación Michelin, etc.
En cuanto veamos que renuevan menú seguramente volvamos para disfrutar de nuevo!
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